Por Guillermo Gonzalez Hudson
En ésta ocasión, con el fin de las campañas en el horizonte y la jornada comicial del 6 de junio a escasas tres semanas, le quiero compartir una serie de datos duros sobre la relación entre los queretanos, los partidos políticos, las ideologías y los candidatos para que sea usted quien haga sus propias conclusiones. Le platico.
Hace tres años, igual que ahora, salieron a la calle a tratar de convencer a los queretanos de que votaran por ellos y las casacas que representaban candidatos de 11 partidos políticos, aunque algunos partidos diferentes que hoy ya no existen. De ellos, sólo cinco lograron mantener el registro, esto es, superaron el umbral del 3 por ciento de la votación efectiva que exige la Ley Electoral del Estado de Querétaro para alcanzar una diputación local, el reconocimiento y asiento correspondiente ante el consejo General del Instituto Electoral del Estado de Querétaro y, ¡por supuesto!, las apreciables prerrogativas.
El pantón electoral ofreció a los queretanos opciones por parte de los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD), Movimiento Ciudadano (MC), Nueva Alianza (PANAL), Verde Ecologista de México (PVEM), Encuentro Social (PES), Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), del Trabajo (PT), Convergencia Querétaro (CQ) y Querétaro Independiente (QI). De ellos, los últimos dos fueron nuevos partidos políticos de carácter estatal que compitieron por primera vez, luego de lograr el registro en julio de 2017.
Además, los partidos ofrecieron opciones mestizas en combinaciones de dos o tres diferentes coaligados, tales como la de MORENA-PT-PES, PRI-PVEM, PAN-PRD-MC y PAN-PRD… Pero de ellos no nos ocuparemos ahora.
Los primeros partidos políticos en abandonar su silla en la sala del Consejo General del IEEQ y, por consiguiente, perder la posibilidad de seguir recibiendo su mesada del presupuesto público fueron los partidos Nueva Alianza y Convergencia Querétaro, que alcanzaron apenas el 2.5 por ciento y 1.7 por ciento de la votación emitida.
En oposición, los únicos que salvaron el registro de manera directa, fueron el PAN, PRI y Querétaro Independiente, los tres al superar por sí mismos el umbral del 3 por ciento de los votos emitidos el día de los comicios, como marca la ley… Al final, se sumarían al festín presupuestal el Movimiento de Regeneración Nacional y el Verde.
De tal suerte que quedó manifiesta la decisión ciudadana de que muchos partidos no eran necesarios.
Por eso no fuera suficiente mensaje, está otro dato muy revelador. Se trata de la desmilitización ciudadana. Una expresión dura pero clara de la distancia que la población ha determinado tomar de los partidos políticos, a quienes, posiblemente, ya no ven como una alternativa de representación ideológica o social.
Al menos eso es lo que se desprende de un análisis realizado a los padrones de militantes reportados por los partidos políticos con registro ante el Instituto Electoral del Estado de Querétaro (IEEQ) en sus informes anuales correspondientes a los ejercicios 2017 y 2020, que fueron entregados en febrero de 2018 y 2021, respectivamente, y son los que se tienen a la mano para comparar situaciones similares.
El padrón estatal de militantes previo a las elecciones queretanas del 2018 presumía una afiliación partidista de 228 mil 795 queretanos por parte de los partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática, Movimiento Ciudadano, Nueva Alianza, Verde, Encuentro Social, Movimiento de Regeneración Nacional, del Trabajo, Convergencia Querétaro y Querétaro Independiente.
De los informes entregados éste año, se desprende una contabilización de 50 mil 564 queretanos afiliados a algún partido político, que en éste caso son Acción Nacional, Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática, Movimiento Ciudadano, Verde, Encuentro Solidario, Fuerza por México, Movimiento de Regeneración Nacional, del Trabajo, Redes Sociales Progresistas y Querétaro Independiente.
Esto es, que de una elección a otra los partidos políticos perdieron el 77.89 por ciento de su militancia. Lo cual se puede explicar por dos causas. La primera, que se trata de ciudadanos que decidieron ya no refrendar su participación política en los partidos en los que tradicionalmente lo hacían. O bien, que los padrones de militantes que habían venido manejando los partidos estaban inflados y, la mayor fiscalización, los descubrió y obligó a instalarse en su base real.
Más allá de la causa, vale la pena poner esto en el contexto de la elección actual. Y es que, mire, el Padrón Electoral oficial del estado de Querétaro para los comicios del domingo 6 de junio, es de 1 millón 755 mil 544 ciudadanos con derecho a ejercer el voto. Potencializado sobre la base de la militancia estatal, descubrimos que hay sólo una participación en los partidos tradicionales del 2.88 por ciento de los queretanos con credencial para votar.
Que eso se traduce en baja participación, que eso explica la muerte prematura de partidos políticos, que ahí está el Qüit del abstencionismo. Quizá ahí esté la puerta entreabierta para la exploración de nuevas formas de participación… no sé, piénselo… Él, que es el principio, fue el primero de los que han de resucitar, para tener así el primer puesto en todo.